Clínica dental con personalidad propia

Hemos llevado a cabo la transformación de un local vacío y diáfano en una clínica dental con personalidad propia. El local, que disfruta de techos altos, propicia un diseño amplio, premisa que tuvo muy en cuenta el arquitecto José Manuel López Mihura a la hora de proyectar la clínica. Como resultado, un diseño en el que predomina el color blanco, el vidrio y la madera clara, cediendo todo el protagonismo a la entrada de luz natural.

La carpintería interior se ejecutó en madera y vidrio de suelo a techo, al igual que las particiones existentes entre las zonas de trabajo y las de paso, que se componen de mamparas de grandes dimensiones en estos mismos materiales.

El Estudio de Interiorismo Pepita de Oliva fue el encargado de la decoración, con la que han creado ambientes modernos y actuales que rompen con la estética habitual de una clínica dental, consiguiendo aportar gran personalidad al espacio.

Todas las instalaciones generales están ocultas por el plenum situado entre el forjado y el techo continuo. El sistema de climatización permite la renovación y aportación de aire de todo el local, además de unidades independientes de climatización para las estancias de trabajo, paso y espera. Con ello se logra adaptar cada zona a la temperatura adecuada para su función.

La iluminación general está compuesta de unidades led empotrables, apoyadas con tiras led perimetrales en gabinetes. De igual manera con tiras led se crea iluminación decorativa en zonas de paso y espera, complementadas con lámparas colgantes de diversas tipologías.

Toda la instalación se controla desde el cuarto eléctrico general, dotado de dos cuadros independientes de iluminación y fuerza, junto con un equipo SAI de apoyo para no tener que suspender la atención en caso de suspensiones momentáneas de suministro eléctrico. Las zonas de trabajo están dotadas desde un cuarto de maquinaria de alimentación eléctrica específica, aire comprimido, desagüe por aspiración, agua potable y desionizada, mediante canalización bajo el solado.

Toda la tabiquería y trasdosados de divisiones existentes se han realizado con sistemas de Placa de Yeso Laminado adaptadas a la altura del local y con la inclusión de lana mineral para reforzar el aislamiento acústico y térmico. Los techos son continuos en placa de yeso laminado igualmente aislados mediante lana mineral, dotados de trampillas de servicio para mantenimiento.

La altura de estos techos se ha adaptado a las distintas estancias para lograr un equilibrio con la carpintería interior y exterior de gran altura. Dado el tipo de carpintería (puertas pivotantes y empotrables) y su envergadura, junto a las mamparas utilizadas, ha sido necesario reforzar los techos y tabiquerías para su correcto anclaje y fijación. Se ha cuidado la accesibilidad en todo el local, desde la entrada mediante rampa adaptada, a los distintos pasos y zonas de espera, aseo o zonas de atención.

El diseño de la fachada, basado en el contraste de la cerámica oscura de gran formato y las carpinterías en madera natural, le aporta al local un elemento diferenciador y singular en el ambiente general de la zona.

Además de servir de escaparate de la actividad que se lleva a cabo en su interior, los grandes ventanales permiten la iluminación natural del espacio sin renunciar a la privacidad, ya que se los ha dotado de vinilos translúcidos que impiden la visión hacia las zonas de trabajo.

Una vez dentro de la clínica, se conserva en el suelo el mismo material que en la fachada, manteniendo piezas de gran formato, con un color más claro que armoniza con el resto de los materiales y colores utilizados creando continuidad entre exterior e interior.

La Clínica Foncoro se encuentra en una zona de gran dinamismo comercial y de servicios, la Plaza de la Fábrica de Tabacos de A Coruña.