El batache, una técnica planificada y exigente
¿Qué es el sistema de contención por bataches?
El diccionario de Real Academia Española define el batache como la “excavación que se ejecuta bajo los cimientos mediante pequeños tramos alternados, para asentar una obra y reducir los peligros para la propia excavación o edificios colindantes”. Glosando esta definición podemos considerar que se trata del “pariente pobre” en la familia de los sistemas de contención habitualmente utilizados en las obras de edificación.
Cuando las características del solar o la existencia de colindantes no nos permiten recurrir a la excavación con taludes y a la sencillez de un muro de sótano tradicional y, por otra parte, la tipología del terreno tampoco nos impone el uso de otros sistemas técnicamente más complejos y caros, siempre nos queda el recurso del “humilde batache”, como solución de compromiso, que podemos ejecutar con medios técnicos muy limitados aún a costa aumentar los plazos de obra.
Este sistema puede utilizarse tanto en la contención perimetral de una excavación en obra nueva con edificios o infraestructuras urbanas colindantes, como en el recalce de cimentaciones y excavación de nuevos sótanos para la ampliación o rehabilitación de edificios ya existentes.
Su elección viene determinada, generalmente, por unas dimensiones del solar que no permiten la entrada de maquinaria específica para otros sistemas de contención, previos al vaciado, como son los muros pantalla o las pantallas de pilotes y micropolotes; o bien por resultar el muro de bataches económicamente ventajoso respecto a las contenciones previas antes indicadas.
El sistema de bataches consiste en un muro de contención, encofrado por el intradós y con el trasdós en contacto con el terreno a sostener, que se ejecuta por tramos alternos dejando entre ellos partes sin excavar que, a modo de contrafuertes, soportan los empujes del terreno y/o las cimentaciones colindantes. Cada uno de estos tramos de muro es lo que, en sentido estricto, se denomina “batache”.
Las condiciones necesarias para que este sistema resulte técnicamente viable son, por una parte, la existencia de un terreno con la cohesión suficiente para permitir un corte vertical estable en el ancho de cada batache y por otra, un nivel freático a cota inferior a la del plano de cimentación durante la fase de ejecución de la obra.
La ejecución se inicia con el vaciado de la parte central del solar dejando una berma perimetral sin excavar, con un ángulo de talud que permita el sostenimiento natural del terreno y que recoja los bulbos de presiones de las cimentaciones colindantes y el empuje del propio terreno. Una vez completada esta excavación central se acomete la excavación de cada tramo o batache y, de manera inmediata, se procede a su hormigonado. Esta operación se repite para cada uno de los bataches, de forma alterna, hasta completar todo el perímetro a contener.
Los anchos de hormigonado de los bataches están condicionados por la estabilidad del terreno y, por economía y optimización de los medios auxiliares, suelen adaptarse a los anchos estándar de los sistemas de encofrados, debiendo aumentarse la excavación a ambos lados para los solapes de las armaduras con los bataches contiguos
Cuando es necesario profundizar varios sótanos resulta usual completar la faja perimetral en cada nivel, proceder al anclaje provisional de los bataches mediante el bulonado y tensado hacia el propio terreno circundante y, a continuación, excavar el nivel siguiente utilizando la misma técnica. En este caso deben contrapearse los bataches de los distintos niveles para conseguir una mayor estabilidad durante la excavación. Esta técnica es una combinación de muro por bataches y la técnica denominada “muro anclado descendente”
Cuando no es posible la estabilización provisional mediante anclajes y, especialmente, en solares urbanos entre medianeras, se recurre al acodalamiento con celosías metálicas entre muros opuestos o en diagonal en las esquinas. Cualquiera que sea el sistema de estabilización provisional que se emplee, podrá eliminarse en cada nivel, conforme sube la estructura interior del edificio, cuyos forjados o losas funcionarán como acodalamiento definitivo frente a los empujes horizontales.
En Desarrolla tenemos actualmente en ejecución tres obras en las que se utiliza la técnica de muros por bataches:
- En la rehabilitación del edificio de Uruguay 11, en Vigo, se recurre a los muros de bataches para el recalce de la cimentación existente y la excavación de un tercer sótano en el interior.
- En la obra de Rey Abdullah 19-21-23 de A Coruña se ejecuta un muro por bataches, descendente y anclado, para contener la excavación en roca, de hasta 4 sótanos, en los lindes con los viales públicos.
- Rehabilitación del Palacio del Marqués de Valladares, obra destacada en la que profundizamos 4 sótanos, en pleno casco histórico de Vigo, manteniendo la fachada original.