Una clínica convertida en luz

En la construcción, como en la arquitectura, nada debe quedar al albur de los caprichos. Cada paso, cada elemento, ha de responder a un fin. Solo así se camina hacia la excelencia. Y da igual que el proyecto sea grande o pequeño, una vivienda o un local comercial. Una rehabilitación o una infraestructura. La senda está escrita y para Desarrolla Obras y Servicios se trata de un mandato fundamental. Como en la recién concluida clínica dental Robur, en A Coruña, un proyecto singular gracias a la poderosa distribución de la luz y su moderno y funcional diseño. Es, en síntesis, una clínica convertida en luz.

Con una superficie de algo más de 150 metros cuadrados, el programa de necesidades presentado por la propiedad a Desarrolla Obras y Servicios distribuía el consultorio en tres zonas. Una primera destinada a la recepción, la zona de espera y el despacho del defensor del paciente y la segunda para construir cinco gabinetes, un despacho y una sala de RX. La tercera y última es el área de instalaciones y salas técnicas.

La experiencia acumulada por los impulsores de Robur permitió afinar la ejecución de esas necesidades, al usar como seña de identidad un valor subyacente que es la atención personalizada al cliente. Para ello, la calidez y la delicadeza de las estancias debían convertirse en uno de los activos de la obra.

Grandes paños acristalados rematados por carpinterías oscuras contribuyeron a dar rotundidad y sofisticación a la clínica, mientras que la idea de limpieza se apoyó sobre unas superficies blancas con acabados lisos.

En un plano más profundo, la calidez se conquistó con el uso de la madera en los planos secundarios o interiores de las estancias. Todo ello pensado para encajar en el principio «alma de roble» que nace del nombre de la propia compañía.

Uno de los elementos significativos del proyecto es la creación de la figura del defensor del paciente, impulsada para transmitir la idea de transparencia por parte de Robur.

Para darle forma, Desarrolla ejecutó en la clínica una estancia totalmente independiente que permitirá a los pacientes trasladar a la empresa de forma privada todas sus inquietudes y necesidades.

En la misma línea, Desarrolla actuó sobre toda la planta de esta clínica convertida en luz, localizada en el bajo de un edificio de siete plantas. Y dio forma al proyecto con una propuesta lumínica que pone en valor cada estancia del consultorio.

El local en el que se ubica la clínica tiene además una altura considerable, lo que permitió al equipo de la constructora crear una sensación de amplitud que se proyecta en prácticamente todos los espacios del consultorio bucodental.

La obra siguió además los mapas de funcionamiento marcados por los fundadores de Robur a partir de su notable experiencia en el sector. Todo ello, para crear una circulación fluida de los pacientes en el interior del consultorio.

Un objetivo que se visualiza por ejemplo en la instalación de dos mostradores, uno para quienes acceden al local y otro para quienes desean pagar y abandonar tras ser tratados.

En definitiva, una clínica convertida en luz que ha hecho de los detalles una seña de identidad.

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